La Parábola de los Dos Cimientos
LA PARÁBOLA DE LOS CIMIENTOS
La roca: Esta representa a Jesús y su mensaje sobre el reino de Dios. Lo que él estaba ofreciendo a través de su sermón era la clave para vivir una vida segura en el sentido espiritual.
La lluvia: representa los problemas de vida, las pruebas que se nos presentan.
El hombre que construyó su casa sobre la roca: Este hombre se dio cuenta que la vida trae sus grandes tormentas, y que sería mejor tener una base inconmovible. La persona que escucha y es obediente al mensaje de Dios puede tener la confianza de que será sostenido por el mismo Señor durante esta vida y en la próxima. Además de eso, al seguir a Jesús, vive una vida libre de pecado y de las consecuencias del pecado. Aun cuando vienen las tormentas de la vida, esta persona sabe dónde acudir para obtener ayuda, protección y consuelo.
La arena: El mundo y todo lo que esta apartado de Dios.
El hombre que construyo su casa sobre la arena: Este no considero las mismas cosas que el hombre prudente. Al rechazar la roca y optar por la arena, fundó su casa sobre un terreno inestable e inseguro. Cuando vienen las tormentas de la vida, este hombre no tiene dirección y hasta se hunde más.
Cada vez que escuchamos el evangelio nos quedamos en la misma situación que aquello que estuvieron escuchando a Jesús ese día. Podemos tomar el mensaje, guardarlo en el corazón y vivir de acuerdo a él, o podemos rechazar las palabras del mismo Señor. Las consecuencias de ambas siguen siendo iguales hoy. ¿Dónde está puesta tu fe y tu confianza? ¿Tu casa está en la roca o en la arena? Cristo continua ofreciendo oportunidades para los que quieran construir sus casas en la roca.
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